Cómo está transformando el mundo el Big Data

Se entiende por Big Data el tratamiento de enormes conjuntos de datos a través de tecnologías innovadoras y que con los métodos de almacenamiento, acceso y análisis tradicionales era inviable.

Este término, aunque para muchos pueda resultar todavía reciente, lleva utilizándose desde los años 70, cuando dos investigadores de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio -más conocida como NASA– publicaron un artículo en el que mencionaban por primera vez en la historia el Big Data e iniciaron toda una revolución en la recolección y el análisis de datos.


Desde inicios de la década de los setenta, diversos especialistas ya daban por hecho que conocer más sobre la información a su alrededor les generaría ventajas. Vislumbraron que si una organización sabía cómo analizar los datos que generaba cada día podría entender cómo:

  • Tener productos mejorados
  • Iniciar una estrategia de marketing más exitosa
  • Recortar sus gastos
  • Producir más en menos tiempo
  • Evitar que los recursos terminen desperdiciados
  • Ganar mercado a sus rivales
  • Ofrecer servicios especiales a un cliente satisfactoriamente y muchos otros beneficios más.

 

Si no tienes claro qué es el Big Data, existen muchas definiciones que lo describen y lo que tienes que tener claro es que en todas ellas es común que las siguientes características estén siempre presentes. Son las que se conocen como las 5 Vs del Big Data:

  • Volumen: Las estimaciones de aumento de datos generados en las redes sociales y gracias a la movilidad que facilitan las redes inalámbricas y la telefonía móvil indican un crecimiento sin precedentes e implica analizar una cantidad enorme de datos que puede pasar de terabytes a petabytes e incluso a zetabytes.
  • Velocidad: la velocidad a la que se crean los datos sumada al hecho de que en muy poco tiempo se vuelven obsoletos, hacen que la capacidad de procesamiento y análisis tenga que estar a la altura para dar respuesta ágil y no perder el valor que generan.
  • Variedad: se refiere a los distintos tipos de datos y fuentes de obtención. Actualmente se pueden encontrar alojados en una gran cantidad de formatos, como bases de datos tradicionales, jerarquías de carpetas creadas por los usuarios, documentos de texto, correo electrónico, mediciones recogidas por sensores, vídeo, audio, indicadores financieros recalculados continuamente, etc. Esta diversidad demuestra la riqueza del Big Data pero también la complejidad que supone gestionarlo adecuadamente.
  • Veracidad: se refiere a la fiabilidad y consistencia de los datos y al grado de confianza que se establece en su utilización. La distinta procedencia y formatos de los datos hacen inevitable dudar de la veracidad de esos datos e implica tener que establecer medidas que la aseguren.
  • Valor: seguramente este sea el aspecto más importante del Big Data. Sacar valor de la explotación de los datos y mejorar la toma de decisiones, de una forma rápida, inmediata y precisa adelantándose a la competencia es el objetivo fundamental.

 

Como puedes ver, a pesar de que el Big Data se concibe como algo muy complejo y que a priori puede parecer útil sólo para las grandes empresas, lo cierto es que el análisis de datos también es necesario y se puede aplicar en pequeños comercios y pymes. De hecho, si la cantidad de datos con la que se trabaja es más pequeña, se le denomina Small Data, y puede reducir costes y tiempo a pequeñas empresas con la única utilización de herramientas tan sencillas como las hojas de cálculo, las apps para contabilizar el tiempo o el análisis de las campañas de marketing. Y es que, conocer detalles como qué producto es el más vendido, qué tiempo dedicas en ir a recoger mercancías o cuántos clics generan tus anuncios puede marcar la diferencia entre tu negocio y el de la competencia.

Y es que, hay muchísimos sectores que están haciendo uso de manera cada vez más ambiciosa y eficiente del Big Data –desde la salud pública hasta el rendimiento deportivo, pasando por tecnología, legalidad, Smart cities y muchos más- pero el campo en que sin duda ha tenido más éxito ha sido en el área de marketing.

Los datos se utilizan para comprender mejor a los clientes, sus comportamientos y preferencias. Por eso, las grandes empresas están ya dispuestas a ampliar los centros de datos tradicionales con los de redes sociales, logs de navegación, análisis de textos y datos que se generan a través de sensores para obtener una imagen completa de su cliente y sacar el máximo partido a esta nueva tecnología.

Ahora mismo estamos llevando a caboen La Nave un curso de Big Data Processing en el que lo alumnas están adquiriendo habilidades como la extracción y transformación de datos, el procesamiento de bases de datos o el Data Cleaning. Si quieres estar al día sobre todos nuestros cursos y actividades, y no perderte ninguno tan interesante como el que te comentamos sobre Big Data, ¡consulta nuestra agenda!